2 de febrero de 2014

FUNDAMENTOS PSICOLÓGICOS DE LA GENERACIÓN DE DATOS SOCIALES

HACIA UNA METODOLOGIA DE LA RECONSTRUCCIÓN

FUNDAMENTOS PSICOLÓGICOS DE LA GENERACIÓN DE DATOS SOCIALES

(Enrique de la Garza Toledo, separata VII)


POR: VÍCTOR HUGO JIMÉNEZ C.


FEBRERO DE 2014


Con lo que se refiere a Hermenéutica y Dato se maneja desde cuatro perspectivas como son: El Conductismo, El Psicoanálisis, El Psicoanálisis y la Investigación Sociológica Empírica y Algunas Reflexiones desde el Materialismo-Histórico; a continuación de manera breve se presentarán, pero que además de se debe tener en cuenta varia cuestiones a la hora de obtener los datos porque su proceso de generación es “a partir de un sujeto en comunicación con otro, es un complejo proceso de la relación genérica entre el sujeto y el objeto, pues éste a su vez, es otro sujeto”. Porque cuando se “trata de la información obtenida a partir de sujetos individuales mediante el uso de técnicas como la entrevista, el cuestionario o la historia de vida, además de las mediaciones ya señaladas, se presenta una muy importante sin cuya elucidación la propia generación de datos por este proceso de interacción puede relativizarse aún más por otras consideraciones: el problema de los supuestos de las teorías psicológicas acerca de la relación sujeto-objeto, o más específicamente, entre sujeto que entrevista y sujeto que responde.” Y estos datos depende de las concepciones que se tengan en cuanto a “1) Acerca de la relación entre el dato expresado y observable con la acción, 2) entre dato individual y hecho social, 3) entre conducta individual y ambiente, 4) entre conductas y “mundo interno" y 5) entre lenguaje y “mundo interno".

l. El Conductismo; en etas nos dice que “es una de las corrientes psicológicas que de una manera o de otra analiza los problemas indicados desde sus propios presupuestos”, ésta trata de “establecer correlaciones entre estímulos, o sucesos ambientales del pasado y del presente, con determinadas respuestas del individuo, conocidas como conductas” (Watson). Con Skinner el llamado conductismo metodológico señala que podría ser considerado como la versión psicológica del positivismo lógico o del operacionalismo. Epistemológicamente tiene detrás el modelo de la caja negra tan popular en el empiriocriticismo, por el cual la "mente" aparece como si fuera una caja negra, de cuyo interior no se puede afirmar nada por no poder ser observado, de tal manera que el psicólogo debe concretarse a tratar de correlacionar datos observables del ambiente (estímulos) con respuestas (conductas) también observables por definición y también para él lo que llama “conductismo radical, acepta la existencia de los "hechos internos" y no los considera inobservables, aunque dichos hechos quedan reducidos a los del mundo orgánico en su sentido físico. Por lo tanto las variables estudiadas por el autor son de tres tipos: 1) Respuestas (R) o conductas, 2) Estímulos (E), constituidos por el medio físico o social y 3) Orgánicas (O), variables neuroanatómicas y fisiológicas. De esta manera trata de establecer leyes de la forma: R=f(E), R=f(R), R =f(O) y O=f(E). Pero el conductismo con algunas críticas de Chomsky (1959) perdió fuerza porque se encargo de decir que “la concepción epistemológica que subyace en el conductismo resultaba ya anacrónica” por no poder darle explicación a algunas conductas de mayor complejidad, además decía que “el modelo conductista de la explicación de las conductas resulta muy simplista al ignorar lo interno (no reducido a lo orgánico) como un elemento activo del proceso de generación de conductas”. En el caso de Skinner hace diferenciación entre respondiente (o reflejo inmediato) y operante (o respuesta inmediata) para los cuales se necesitaba un reforzante para llegar a la “ley del condicionamiento que diría: "si a la aparición de un operante le sigue la presencia de un estímulo reforzador, la fuerza aumenta". y en esto Chomsky difiere de esta  ley del condicionamiento y dice que “no es sino mera tautología, porque en la propia definición de estímulo reforzador está el aumentar la intensidad de la respuesta; es como si dijéramos que si la fuerza aumenta la fuerza aumenta”.

2. El Psicoanálisis; de Freud “es la teoría de la lucha de los instintos y la realidad mediada por el "yo". Es la teoría de cómo los instintos se reprimen, de la transformación del .principio del placer en el principio de realidad. Transformación tanto al nivel del género humano (filogénesis) como del individuo (ontogénesis).” Y en una primera versión el centro “del conflicto se situó entre los instintos sexuales y el "ego". En la última versión de esta teoría sería la lucha entre el instinto de la vida (Eros) y el de la muerte (Tanatos)”, eh integro una teoría de personalidad en la cual aparece “el "Ello" sería el campo de los instintos, del placer. El "Yo" mantendría la comunicación con el mundo exterior. Además, el "Yo" aparece disociado en el Yo propiamente dicho y la conciencia moral que lo juzga: el "Super Yo". Este Super Yo se formaría, según Freud, durante la infancia, asociado a la dependencia del niño con respecto de los padres, los que a su vez no hacen sino transmitir el Super Yo cultural.6 Sobre el Yo se ejercen por tanto varias fuerzas: la del "Super Yo" que puede traducirse en angustia moral, la del mundo externo que pueda aparecer como angustia real y la del Ello que se puede manifestar como angustia neurótica.

Desde el punto de vista metodológico se considerará en el psicoanálisis -de una manera que recuerda a la "filosofía de la vida"- que los datos de la conducta y los de la conciencia no deben tomarse como válidos en sí mismos, sino que deben ser reinterpretados a partir de la teoría psicoanalítica y de la biografía del paciente”, para que de esta manera la entrevista y el test no quedan absolutamente excluidos, pero el significado de cada respuesta tiene que reinterpretarse. La relación entre la teoría y las preguntas no es lineal, como pretendería el punto de vista positivista y conductista y, por tanto, la técnica toma la forma de asociación libre más atención flotante, que llevan a no privilegiar de antemano una respuesta con respecto a otras. La entrevista psicoanalítica se mueve, de esta manera, con datos de comportamientos pasados relatados, reacciones presentes espontáneas y reacciones presentes provocadas. Entre paréntesis, la entrevista psicoanalítica no es igual a la historia de vida, sobre todo porque ésta sólo busca moverse en el plano del conciente”. Y además en “el psicoanálisis no puede sino reconocer como un elemento de mediación entre el conciente y el inconciente la propia presencia del analista en la entrevista. Por ello […] los transtornos que causa la presencia del observador durante la entrevista son un dato más a considerar en todas sus implicaciones”, por los diferentes fenómenos que se pueden presentar a la hora de la entrevista como la transferencia, la resistencia, la contra transferencia, la propia presencia, angustias etc., que contaminan el proceso de obtención de datos…

3. El Psicoanálisis y la Investigación Sociológica Empírica; el autor T. W. Adorno en el trabajo "La Personalidad Autoritaria" “parte de la hipótesis de que las convicciones políticas, económicas y sociales de un individuo forman un amplio y coherente patrón y que este patrón es una expresión de profundas tendencias de su personalidad. Esta hipótesis general se traduce en una serie de preguntas referidas a la personalidad fascista: ¿Qué quiere la personalidad fascista? ¿Cuál es el origen de esta personalidad? ¿Cuáles son las fuerzas internas de dicha personalidad?”. En esta investigación se “manejan toda una serie de supuestos teóricos y metodológicos en parte tomados del marxismo, en parte del psicoanálisis. Primeramente, como establecía la teoría del Gestalt, la personalidad es una totalidad. Segundo -tratando de recuperar al psicoanálisis- que los tipos políticos se ven influenciados tanto por la ideología como por necesidades internas profundas en la persona y ambas forman un todo organizado en la personalidad. Entendiendo en este caso por ideología un sistema de opiniones, actitudes y valores sobre el hombre y la sociedad. Es decir, las ideologías, siendo sociales, tendrían un impacto diverso sobre los individuos dependiendo de sus necesidades internas”, además esta investigación diferencia entre inconciente y conciente por lo que los datos estarán “mediados por: 1) la sinceridad (pensamientos que no se revelan en situaciones normales), 2) pensamientos que no pueden ser aceptados ni si quiera en la interioridad de los individuos, 3) pensamientos vagos o incapaces de traducirse en palabras y 4) la distancia entre ideología y acción (relacionada con el problema de la intensidad de los deseos, actitudes y valores para emprender la acción )”.

4. Algunas Reflexiones desde el Materialismo-Histórico; en las reflexiones finales de este tema nos dice que no “basta desde el punto de vista materialista marxista con señalar que el sujeto es un conjunto de relaciones sociales, sin añadir que el hombre es además especificidad junto a generalidad. Que en el hombre se entrecruzan la sociedad interiorizada en su conciencia e inconciencia al lado de lo irrepetible de cada biografía” dado que se “problematiza la relación entre individuo y sociedad y sobre todo la relación entre dato extraído de los individuos con aquellos que tengan una referencia más directa con lo social. Un primer bloque de mediaciones que en una estrategia reconstructiva tendría que considerarse es la que va del individuo al grupo primario, a la clase social y a la sociedad nacional. De esta forma, el dato que refleje los niveles más abstractos de lo social no puede ser simplemente el promedio de los datos individuales. Es decir, confundir reconstrucción de mediaciones con promedio estadístico resulta una simplificación inaceptable desde la perspectiva de la reconstrucción”; muchas mediaciones en una “concepción materialista, reconstructiva de la realidad en el pensamiento, deben llevar a la consideración de la no absolutización del dato empírico ni mucho menos de la técnica”. Pero en “los momentos de mayor heterogeneidad pueden aceptar datos promedio cuyas mediaciones entre lo individual y social no hayan sido esclarecidas suficientemente”.

 

 

De la Garza, E. (1988). Hacia una metodología de la reconstrucción. Fundamentos, critica y.