3 de diciembre de 2013

FUNDAMENTOS PSICOLÓGICOS DE LA GENERACIÓN DE DATOS SOCIALES.

POR: CHRISTIAN IRVING GARCÍA GARCÍA.


En el presente documento se habla acerca de los fundamentos psicológicos de la generación de datos sociales, donde en lo general, se tratará la forma de obtener los datos tanto del conductismo como del psicoanálisis y la interpretación de los mismos.

La investigación social recurre comúnmente al interrogatorio de sujetos implicados en algunas acciones sociales, donde el principal objetivo es generar información acerca de este sujeto tomando en cuenta lo que sabe, cree, espera, opina, siente, quiere o alguna explicación subjetiva acerca de algún tema o fenómeno en específico.

Este interrogatorio se puede llevar a cabo basándolo en 2 corrientes filosóficas que menciona Enrique de la Garza Toledo, una de ellas como anteriormente se mencionó es el conductismo y la otra el psicoanálisis.

Dentro del conductismo se habla acerca de Watson quién hace de la psicología una ciencia de las conductas y el experimento de las mismas, este personaje conduce a la psicología a establecer correlaciones entre estímulos y Conductas, ambos de naturaleza observable, perteneciendo pues al positivismo, donde todo el conocimiento se adquiere a través de los sentidos.

Esto lo corrobora Skinner al mencionar que es la versión psicológica del positivismo lógico, donde presenta el modelo de la caja negra en donde la mente es considerada como una caja negra, cuyo interior no se puede afirmar al no ser observado a tal manera que el psicólogo debe tratar de correlacionar datos observables (estímulos) con respuestas (conductas) que también son observables, haciendo una aceptación de interno (de lo no observable) pero reduciéndolo al aspecto orgánico.

Chomsky a su vez, hace una crítica a esta corriente, ya que según él, el conductismo sufre de una incapacidad para explicar conductas complejas, pues solo se centra en lo observable, dejando de lado aspectos no observables pero de gran importancia que afectan una conducta.

A pesar de sus críticas, el conductismo justifica el uso de cuestionarios y entrevistas donde las respuestas valen por sí mismas, al tener un carácter objetivo, por lo tanto el investigador tiene la tarea de interpretar las respuestas igualándolas a motivos; lo cual va a permitir una sistematización agrupando respuestas en cantidades y correlacionarlas con otras y con diversos estímulos, un ejemplo de esto es el típico examen matemático escolar, donde se evalúa al alumno según sus respuestas descritas en papel, atendiendo el lado objetivo de estas.

En cuanto al psicoanálisis, se hace mención de que es la teoría que habla acerca de cómo los instintos se reprimen, en una transformación del principio del placer en el principio de realidad.

Freud como padre del psicoanálisis, realizó una teoría acerca de la personalidad, donde investigaba lo observable con lo no observable, en un primer plano, hablaba del inconsciente (ello) donde se encontraban todas aquellas conductas que tenían que ver con el placer y con el instinto; del consciente (súper-yo) donde se sitúa la moral que juzga, es decir, de aquellas barreras comúnmente culturales que generan la lucha con el inconsciente para que éste no salga a flote; y por último el preconsciente (yo), donde se encuentra todo aquello que está en proceso de ser consciente.

Por lo tanto un interrogatorio basado en el psicoanálisis, proporciona el análisis de la conducta partiendo de que los datos de la conducta y los de la conciencia no deben tomarse como válidos sino que deben ser reinterpretados a partir de la teoría psicoanalítica y de la biografía del paciente, por lo que las respuestas de la entrevista o test, deberán de reinterpretarse tomando en cuenta la mediación del consciente y del inconsciente. Esto lo podemos ejemplificar con los test que se les realizan a policías para ver si son aptos o no para el trabajo o para ver si han tenido nexos con criminales, donde sus respuestas objetivas no son el eje rector del evaluador si no lo subjetivo que en ellas se encuentra he aquí la diferencia con el interrogatorio conductista.